10 El-Namaki, M.S.S.: Desarrollo y promoción de tecnología y habilidades técnicas en pequeñas empresas manufactureras rurales. (En esta publicación).
El acceso a la tecnologías apropiada, y su aplicación, es primordial para mejorar la productividad. Sin embargo, las pequeñas industrias en general, y las pequeñas industrias rurales en particular, tienen características distintas que complican el proceso del desarrollo tecnológico y del mejoramiento productivo dentro del sector. En primer lugar es necesario decidir si una determinada rama de la industria se presta a una fabricación en pequeña escala. También debe reconocerse que el insumo tecnológico es función de múltiples variables que incluyen el acceso a la información y a la escala de inversiones. Se hallará, por lo tanto, que existe una medida de disparidad tecnológica entre los distintos tipos de pequeñas industrias que uno puede considerar.
Trabajando en una carpintería.
En general, como ya se ha indicado, se halla que las pequeñas empresas rurales operan en un ambiente caracterizado por mercado, materia prima y situaciones de apoyo difíciles o débiles. Dentro del grupo de las FB-SSI, este proceso es aún más complicado por la extrema pequeñez del grupo “micro” de empresas. Como se ha hecho notar anteriormente, estas operaciones artesanales predominantemente basadas en la familia a menudo no emplean maquinarias 11.
11 Ver: Fisseha, Y. op. cit.
Los problemas del desarrollo y la transferencias de tecnología dentro del grupo de las SSI han demostrado no ser fáciles de resolver. Vista la capacidad muy limitada de desarrollar la tecnología dentro de las mismas SSI, se han hecho muchos esfuerzos para llevarles tecnologías existentes. Un método ha sido el sistema de la “industria hermana” (por el cual una empresa de un país desarrollado “adopta” una “hermana” menor en el mundo en desarrollo para transferirle tecnología). Esto no ha funcionado muy efectivamente en los pocos casos que han sido estudiados, ni hasta ahora la colaboración con socios extranjeros ha dado una contestación satisfactoria sobre una base a la par. Los acuerdos de industrias hermanas dentro de un país o entre países en vías de desarrollo pueden demostrar ser más positivos y deberían ser intentados.
Hay algunos ejemplos buenos de desarrollo tecnológico en el país gracias a iniciativas individuales y a tentativas de empresas radicadas. Algunas iniciativas institucionales siguiendo diferentes líneas, también prometen dar resultados, siendo al parecer el caso más tangible el de las organizaciones orientadas a la extensión. Las organizaciones de investigación y desarrollo han demostrado su efectividad en algunos países, pero no en todos. La capacitación está demostrando ser un método útil para la diseminación tecnológica, pero hay problemas serios en la identificación del grupo a capacitar, en desarrollar los materiales adecuados de capacitación y en seleccionar el enfoque apropiado.
Mientras se tienen presente las diferentes necesidades de las “micro” y de las mayores SSI, una acción remediadora podría seguir dos cursos. Al nivel macro, diversas actividades podrían llevar al mejoramiento:
- cooperación tecnológica regional organizada y coordinada por una organización regional, tal como la “Technonet Asia”;- asegurarse que los sistemas de capacitación vocacional incluyan vínculos obligatorios o una componente interna;
- estimular la capacitación técnica a nivel básico en las aldeas donde se haga hincapié en las habilidades técnicas fundamentales y principios de tecnología para la elaboración de productos del bosque;
- estimular a los funcionarios de extensión agrícola y forestal para llevar a cabo un servicio asistencial tecnológico y forestal para las FB-SSI fuera de los fundos, complementario a sus otras tareas. (Su papel puede consistir simplemente en informar a los empresarios sobre donde hallar fuentes de asistencia tecnológica especializada);
- adoptar un enfoque de consultas continuas sobre el problema del desarrollo tecnológico;
- expandir los programas para predios industriales en una forma adaptada a las áreas rurales;
- estimular sea la reintroducción o la continuación de la producción de herramientas y equipos tecnológicamente superados, necesarios para las FB-SSI en los países en vías de desarrollo;
- perfeccionar el proceso de la transferencia tecnológica mejorando el proceso de identificación de la demanda y dando apoyo a los vínculos cooperativos;
- estimular la participación de capital de ventura en la comercialización de tecnologías autóctonas.
Al “micro” nivel deben hacerse progresos tanto a través de una acción colectiva como mejorando la ejecución individual. Una acción colectiva exige una colaboración estrecha entre los empresarios de las FB-SSI, por ej., por medio de la creación de cooperativas y del desarrollo de relaciones entre industrias hermanas nacionales o regionales. A nivel individual el asunto es aumentar las capacidades individuales del empresario y el equipo de sus instalaciones. Las capacidades individuales podrían ser aumentadas a través de una práctica continua usando mejores formas de hacer las cosas o, a través de la capacitación y la consultoría.
Los problemas específicos del “micro” empresario pueden ser encarados de la siguiente manera: primero, estimulando las asociaciones de manufacturadores a nivel de aldea. Estas podrían cooperar en la adquisición y uso de máquinas y equipos, en el intercambio de asesoramiento técnico y complementando los procesos de cada uno. Segundo, mediante la provisión de unidades técnicas moviles de apoyo para visitar las aldeas, con el propósito de asistirlas en problemas técnicos específicos. Tercero, mediante las “instalaciones comunes” de una aldea industrial, donde equipos específicos de producción para procesos industriales se ponen al alcance de los pequeños empresarios. De esta manera se asegurará la accesibilidad de las pequeñas unidades a equipos cuya capacidad mínima es demasiado grande o cuyo costo demasiado alto para cada uno de ellos individualmente. Independientemente de la naturaleza exacta de la asistencia es esencial la descentralización de los servicios de apoyo y de las instalaciones para las áreas rurales, para un mejor acceso a esquemas de asistencia por parte de “micro” SSI basadas en productos forestales, y otros tipos de SSIs.
Las diferentes necesidades tecnológicas de las FB-SSI, “micro” y mayores, sugieren el agrupamiento por segmentos industriales a fin de identificar las necesidades diferentes, las áreas de debilidad y de fuerza. A veces el problema de la tecnología de la producción es simplemente la no disponibilidad o escasez de herramientas y equipos sencillos empleados en los procesos productivos y técnicas en uso actual. Es el caso en particular de las “micro” empresas, y hay que esforzarse para asegurar que, donde existen controles de importación estas necesidades sean previstas en las listas de importación. Para las “micro” empresas FB-SSI, el mejoramiento de la eficiencia con la cual los métodos corrientes de extracción y elaboración de materia prima se aplican, puede ser más decisivo que nuevas técnicas de producción. El hincapié debería hacerse en la reducción de desperdicios y costos.
Para contrarrestar la tendencia de ofrecer equipos a las FB-SSI sin considerar adecuadamente su capacidad de asimilación, debería darse mayor énfasis a mejorar primero la capacidad de manejo y organización de los propietarios y las habilidades técnicas de los operarios. Debe tenerse cuidado en no dar curso a políticas que subsidien costos de capital para no distorsionar las decisiones, favoreciendo el uso de maquinaria allí donde éstas puedan no ser apropiadas, ya sea en términos de capacidad técnica o capacidad administrativa para “absorber” una producción más intensiva, en capital.
Si bien hay variación por país y entre las industrias, la extensión de los vínculos productivos de las SSI con el subsector industrial de gran escala parece ser limitada. La capacidad para la transferencia tecnológica entre empresas grandes y pequeñas puede, por lo tanto, no ser a menudo mayor que a través del empleo de mano de obra en las SSI, que es una fuente común de capacidades técnicas, que permite a los empresarios potenciales construir posteriormente pequeñas empresas. Sin embargo, allí donde la subcontratación es factible deberá hacerse lo posible para explotar el pleno potencial de dichos vínculos para la transferencia tecnológica.
El personal de extensión agrícola y forestal debería ser empleado al máximo posible como agente de extensión industrial, dado que no son expertos tecnológicos, su función debería ser la de ayudar en la identificación de fuentes posibles de información y asistencia especializada para las FB-SSI. Estos arreglos tienen sentido para sacar ventajas de las redes de extensión existentes y para permitir a las instituciones de apoyo industrial-rural especializado concentrarse en su propia finalidad, con un mínimo de trabajo en extensión general. Además, muchas de las tareas de las FB-SSI están estrechamente vinculadas con la agricultura o el sector forestal y podría ser posible atenderlas conjuntamente con estos sectores.
