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ANEXO B
Las diversas opciones para la plantación de árboles (continuar)

B. 4 Emplazamientos para la plantación de árboles

Como hemos visto en la controversia sobre el eucalipto, los factores de emplazamiento pueden ser un factor determinante de primer orden en el éxito o fracaso de las actividades de plantación de árboles, a más de la conveniencia de las funciones que se desea cumplir o las especies seleccionadas con tal propósito. Si un posible usuario no goza de una tenencia asegurada del lugar donde se piensa plantar, la adopción de las innovaciones en materia de plantación de árboles sería totalmente imposible (p.ej. como lo fue la silvicultura agrícola para los agricultores sin tierra de Karnataka). Si es así, las tierras deben volverse asequibles, ya sea por medio de innovaciones en la infraestructura social (p.ej la redistribución de la tierra), o deben escogerse tecnologías que sean compatibles con las oportunidades espaciales que tiene el usuario; p.ej. muchas familias “sin tierra” poseen por lo menos un lote con casa en el cual quizás tenga un pequeño huerto casero, o quizás tengan derechos de usufructo sobre terrenos comunales. Para garantizar que los beneficios de los árboles plantados en terrenos públicos realmente se destinen a los miembros más pobres e indefensos de la comunidad, podría ser necesario contar con el asentimiento de la comunidad para que se concedan derechos de tenencia especial a los plantadores, e incluso si los árboles se plantaron con el esfuerzo de toda la comunidad.

Cuadro 17. Nichos en el paisaje para la plantación de árboles. Adaptado de: Rocheleau et al. (1989), Raintree (1989), Scherr (1987), Young (1989), Hardcastle (1987).

NICHOS EN EL PAISAJECOMENTARIOS
 
TERRENOS FORESTALESparticulares, comunales, estatales
1.Bosques y terrenos boscosos"           "            "
2.Plantaciones forestales"           "            "
3.Linderos forestaleszonas tampón en perímetros forestales
 
TIERRAS DE CULTIVOParticulares, comunales, estatales; de regadío/de secano
4.Tierras de cultivo en barbechoCampos cercanos/lejanos: actualmente cultivadas/en barbecho
5.Campos cultivables permanentesCultivos anuales/perennes de regadío/de secano
6.Estructuras de conservación en los camposTerrazas, terraplenes, acequias de drenaje, etc.
7.Bosquetes en las fincasMonocultivos o cultivos mixtos/de uso múltiple
8.Huertos frutales, bosquetes"         "           "      "           "            "       "
9.Recintos de cada hogarLugar de los huertos caseros (de incipientes a intensivos)
10.Linderos de la propiedad agrícolaIncluyen linderos internos de los campos, vallas de separación, setos vivos, etc.
 
TIERRAS DE PASTOREO 
11.Tierras de pastoreoTierras de pastoreo accidentadas
12.PastizalesTierras de pastoreo plantadas o notablemente mejoradas
13.Estructuras de conservación en los pastizalesTerraplenes, drenes pantalla, microzonas de captación, etc.
 
CURSOS DE AGUA 
14.Márgenes de ríos, plancies aluviales, orillas de lagosCursos de agua naturales
15.HondonadasNaturales y artificiales
16.Canales de riego/drenajeArtificiales
17.Estanques de riegoEstanques en las riberas/playas
18.Pozos y manantialesLas zonas circundantes pueden sufrir de enormes presiones de pastoreo
19.Piscinas piscícolasNecesitan sombra y/o alimento
20.Habitats costerosNumerosos subnichos, incluso manglares
 
OTROS 
21.Huertos fuera de la fincaSuelen encontrarse en sitios especialmente productivos, como planicies aluviales
22.Espacios públicos o compartidosCategoría general, que incluye mercados públicos, etc.
23.Ejidos o de uso comunalUtilizados en común para pastoreo, recolección, cacería, etc.
24.Bordes de los caminos y senderosLugares de bajo costo de oportunidad
25.Barreras protectorasGrandes fajas protectoras pueden atravesar muchas parcelas
26.Habitats periurbanosNumerosos subnichos
27.DunasSitios para plantaciones de estabilización
28.OasisDotados de un alto nivel hidrostático

Uno de los factores que convirtieron una innovación de agroforestería-- que muy probablemente habría tenido éxito-- en un problema social de la controversia sobre el eucalipto en la India, a saber, la utilización de tierras de propiedad privada para la plantación de árboles con subsidios fiscales, ha causado crisis en otros lugares. Esto lo veremos en el siguiente extracto de un trabajo sobre el desarrollo forestal social en Nepal.

 Arboles en terrenos de propiedad privada en Nepal
Plantar o no plantar, he ahí el problema
 
 En los últimos años, ha habido un interés cada vez mayor en plantar árboles en terrenos de propiedad privada en Nepal. Se ha criticado este sistema alegando que solamente beneficia a la gente que tiene bastantes tierras. Sin embargo, como en Nepal hay poca gente que no tiene tierra, es posible que reorientando la plantación hacia pequeñas extensiones de tierras marginales no agrícolas (bordes de campos, lechos de arroyos, etc.) y dejando de establecer bosques en tierras de propiedad privada (bastante grandes), se podría conseguir plantaciones que beneficien a los pequeños agricultores. Es posible, pero queda por comprobarse, que una reducción consiguiente de la presión sobre los recursos forestales de propiedad común podría incrementar el acceso a estos recursos para los agricultores más pobres y la gente sin tierra. Se ha argumentado que cualquiera que sea el valor de la plantación particular, se la debe considerar como un complemento y no como una alternativa a la plantación en terrenos de propiedad común. 
 Extracto tomado de: Yam Malla y Robert Fisher. Plantación de árboles en tierras de labranza privadas en Nepal: el aspecto de equidad en: Anon, Multipurpose Tree Species for Small Farm Use. 1–5, Noviembre 1987, Pattaya, Tailandia. Winrock International, IDRC, FAO. 

Es interesante que los dos nichos más accesibles para los pobres y desfavorecidos de la comunidad suelen ser aquellos que están más cerca y más lejos de su hogar; p.e., el huerto casero y los terrenos de la comunidad. Esto fue señalado por Rocheleau (1987) en su análisis de las oportunidades para las mujeres africanas, pero si pensamos en lo que hemos aprendido de nuestro análisis de la controversia sobre el eucalipto, podría aplicárselo a muchos otros grupos desfavorecidos.

 Los huertos caseros como un nicho agroforestal especial para las mujeres 
 En sistemas de uso de la tierra para la agricultura
El cultivo y aprovechamiento de huertos caseros por mujeres es un fenómeno generalizado entre los grupos establecidos, en todas partes del mundo (Buch 1980, Niñez 1985). Esto es particularmente pronunciado en Latinoamérica, en aquellas zonas donde las mujeres tradicionalmente no cultivan la tierra, por cuanto los huertos ofrecen un nicho para la producción agrícola y son considerados como una extensión del hogar. El huerto casero es, a menudo, una forma de eludir los tabúes contra los cultivos en las tierras de cultivo principales y suelen considerarse como una extensión del hogar, que es el ámbito de la mujer. Además, esas parcelas pertenecen al área del hogar por su ubicación, siendo accesibles a las mujeres cuya movilidad puede estar restringida por las costumbres o por la dificultad de organizarse para movilizarse a otro lugar cuando hay niños que cuidar, alimentos que elaborar y comida que preparar. Los huertos caseros brindan la oportunidad de intensificar el aporte de trabajo para incrementar la producción, sin que sea necesario desplazarse del hogar, con un horario flexible y adaptable a las otras tareas del hogar (Chaney y Lewis 1980).
 
 El huerto casero es singularmente idóneo para los proyectos agroforestales con mujeres. El pequeño tamaño de la parcela favorece los sistemas de pisos múltiples, mientras que el control de facto ejercido por las mujeres y la permanencia (o permanencia relativa) del sitio estimula la inversión en cultivos arbóreos y mejoramiento del sitio (terrazas, abono natural, cercados). El tamaño reducido de la parcela también significa una alta relación entre el área periférica y la cercada (Rocheleau y Hoek 1984) y, por tanto, es posible destinar una proporción relativamente alta del potencial productivo del sitio a setos vivos para fines múltiples. El sitio puede ser, además, un lugar ideal para ganado menor, por ejemplo, gallinas o conejos enjaulados, y puede rendir residuos que sirven para alimentar cerdos o cabras en corrales cercanos, o forraje complementario para algún animal lechero mayor. Una pequeña parcela de uso intensivo puede ser, así mismo, un sitio para aprovechar el estiércol del ganado estabulado, lo cual permite una eficiencia de costos. 
 Aunque puede haber huertos caseros dentro de los diversos sistemas, que comprenden desde la agricultura nómada hasta los cultivos múltiples intensivos en parcelas permanentes, los huertos caseros parecen ser el ámbito propio de la mujer. Esto es así cuando ese trozo de campo constituye uno de las varias parcelas que tiene el hogar, o cuando los hombres están dedicados a trabajar, casi exclusivamente, fuera de la propia unidad agrícola. En áreas intensamente cultivadas y donde hay una tremenda escasez de tierras, es posible que todo el hogar trabaje el huerto casero bajo la supervisión del jefe del hogar, como sucede en ciertas zonas del sudeste asiático (Sommers 1978), Hunink y Stoffers 1984). En tal caso, la justificación del huerto casero radica más en el incremento de la densidad de mano de obra en las pocas tierras disponibles que en el uso eficiente y diversificado del tiempo que pueden tener las mujeres. Aun así, estas parcelas pueden tener una importancia relativamente mayor para las mujeres que para los hombres, basándose en la distribución del trabajo dedicado y en que los hombres pueden contar con otras fuentes de ingresos monetarios (Stoler 1978). Esta situación se refleja, también, en la tendencia a dejar los huertos caseros en herencia a las mujeres de Java, mientras que sus hermanos heredan los terrenos de arrozales (Palmer 1978, FAO 1979). 
 Entre los pastores
Si bien el huerto casero es principalmente un fenómeno de los agricultores establecidos, existe un nicho análogo entre algunos pastores seminómadas. Los animales lecheros, las crías o los animales enfermos pueden ser atendidos por las mujeres en pequeños corrales especiales cerca del hogar, como acostumbran los Maasai en el sur de Kenia (Barbara Grandin, comunicación personal; Penny Nestel, comunicación personal, Nambombe 1984). Tal como sucede con el huerto casero, la ubicación de estos corrales especiales disminuye al máximo el tiempo transcurrido lejos del hogar y permite una inversión mayor que la acostumbrada de tiempo, atención y protección. El aprovechamiento de esta unidad de uso de la tierra ofrece una base justificada para la introducción de una tecnología agroforestal, basada en el forraje, en los espacios circundantes o adyacentes. Dicha tecnología, que permitiría obtener un forraje de excelente calidad, fortalecería las ideas de cuidados intensivos, la comodidad de la cercanía del hogar y la producción lechera para la venta o distribución por las mujeres.
 
 Extracto tomado de: Dianne Rocheleau 1987. "Women, trees and tenure: implications for agroforestry research and development. En: J. B. Raintree (ed.). Land, Trees and Tenure: Proceedings of an International Workshop on Tenure Issues in Agroforestry, ICRAF y el Centro de Tenencia de la Tierra, Nairobi y Madison. 

Sin restar importancia a las grandes dificultades en las cuales pueden encontrarse las familias sin tierra y casi sin tierra, su situación con respecto a la plantación de árboles quizás no sea tan desesperada como podría suponerse, a primera vista. De nada les sirve a esas familias que los planificadores de proyectos presupongan la imposibilidad de ayudarlas, cuando podrían ser los usuarios más beneficiados por su participación, aunque sea modesta, en la plantación de árboles. ¿Qué mejor ejemplo de esta afirmación que la arboricultura rural tradicional en Bangladesh?

La silvicultura entre la gente sin tierra y casi sin tierra en Bengladesh
Categoría de gente sin tierraDescripción de los prediosPorcentaje de hogares
 1Absolutamente carentes de tierras sin derechos de propiedad sobre los predios agrícolas ni los terrenos de la finca15
 2No poseen tierras agrícolas pero alegan derechos de propiedad sobre el terreno de la finca29
 3Alegan derechos de propiedad sobre terrenos agrícolas de <0,5 acres y pueden ser propietarios del terreno de su finca21
  Total de gente sin tierra y casi sin tierra65
 A pesar de todo, la gente planta árboles
 La mayoría de las familias rurales tienen una casa con un terreno muy pequeño, por lo cual sus posibilidades de dedicarse a la arboricultura son muy limitadas. El 97,7% tienen un terreno menor que 0,40 acres. Sin embargo, parece que la arboricultura rural es generalizada en Bangladesh. Se hizo una visita a un agricultor en Nipharmari Thana, que tenía 0,15 acres de arrozales y una finca con un terreno que ocupaba alrededor de 0,15 acres. El terreno de la casa contenía 3 árboles de mango, 5 de nanjea, 3 de neem, 5 de chassom y 1 de guaba, unos pocos árboles de limón y tres bosquetes de bambú. El es muy representativo, en el sentido de que utiliza todo espacio libre para plantar árboles que producen fruta, biomasa para cobertura vegetal, energía y otros productos y, con el tiempo, madera para utilizarla o venderla.
 La arboricultura rural en Bangladesh es un sistema antiguo y bien afincado para la producción forestal de rendimientos sostenidos, y es absolutamente idónea para las necesidades y recursos locales. Los agricultores conocen muy bien las técnicas, el manejo y las especies, y ellos constituyen un gran aporte al desarrollo forestal. El Departamento Forestal tiene un conocimiento y una comprensión limitados de la agroforestería, y su organización no es muy adecuada para las actividades de extensión y apoyo a la agroforestería.
 Extracto tomado de Bo Ohlsson 1984a. "Towards a system of promoting and supporting tree husbandry and rural forestry in Bangladesh; report from a consultancy in social forestry in Bangladesh. Estocolmo y Ohlsson 1984b. Composite planting in Bangladesh. ORGUT, Estocolmo.

La arboricultura en el terreno de la finca es incluso más impresionante cuando la comparamos con el desarrollo forestal estatal.

 La forestería doméstica comparada con el desarrollo forestal estatal 
 La magnitud y la estructura del sistema de producción forestal doméstica -sistema según el cual numerosas unidades pequeñas obtienen una producción agregada grande- se basa en la variedad, flexibilidad, objetivos de uso múltiple, aptitudes prácticas, conocimientos y dominio de la actividad y está integrado con las actividades agrícolas. El extenso bosque estatal se basa en unidades grandes, una tecnología conocida y una administración centralizada y la rígida aplicación de reglas y normas uniformes. Los dos sistemas están encauzados a diferentes tipos de produción. Todo apoyo para los agricultores debe tener un efecto catalizador y de respaldo. El Departamento Forestal no está organizado para atender a centenares de miles de pequeñas “plantaciones” … esto lo manejan mejor los mismos agricultores. Y las necesidades están donde se encuentran esos agricultores. 
  Bosques estatalesForestería doméstica en la finca  
 Area total (ha)2'430.000270.000  
 Porcentaje del bosque total9010  
 Area productiva850.000270.000  
 Porcentaje del área productiva7030  
 Volumen en pie (millones m3)50–10075–82  
 Porcentaje de volumen total en pie (%)5040  
 Extracción anual (millones m3)0,74–0,946,1–8,9  
 Porcentaje de extracción anual10–1189–90  
 Porcentaje de oferta anual (%)    
  bambú1090  
  trozas3070  
  leña1090  
 El sistema de producción forestal doméstica representa, aproximadamente, el 40% del volumen total de madera en pie en Bangladesh y podría abastecer un 70% de todas las trozas a los aserraderos, el 90% del total de bambú y 90% de toda la leña. La producción se lleva a cabo en los terrenos anexos a la casa, en una extensión que representa alrededor del 10–30% de los terrenos forestales bajo control estatal. Por lo tanto, la forestería doméstica ya ocupa un sitio importante en el desarrollo forestal. Para que se puedan desarrollar políticas nacionales y estrategias para este sistema, es necesario que se conozca cuáles son los problemas y oportunidades de la forestería doméstica y que se establezcan los objetivos (1984a:ii)
Fuentes: Bo Ohlsson, 1984a y 1984b.
 

En regiones donde la densidad demográfica es sumamente alta, como Bangladesh, quedan pocos terrenos comunales que los pobres puedan utilizar, salvo las tierras públicas intersticiales como la: bordes de las carreteras y márgenes de los canales. En aquellas zonas donde los terrenos comunales siguen siendo de buen tamaño, los agricultores marginales y las familias sin tierras muchas veces dependen de tales terrenos para sobrevivir. Incluso en lugares donde no hay escasez de tierras, en sentido absoluto, las restricciones al acceso a la tierra pueden colocar a las mujeres productoras en desventaja, aun cuando la comunidad dependa mayormente de ellas para sus alimentos de subsistencia, leña, forraje y recolección de plantas. Esto sucede, especialmente, en Africa. Siendo así, las tierras comunales pueden tener una importancia estratégica como el lugar que todavía permite satisfacer todas esas necesidades. Observaciones de Rocheleau, que constan en el siguiente recuadro, sobre el uso de las tierras comunales por las mujeres, pueden aplicarse ceteris paribus a otros grupos desfavorecidos; p. ej., grupos étnicos minoritarios, la gente sin tierra y los pobres, en general.

 Las tierras comunales: un nicho especial en el paisaje para las actividades productivas de la mujer 
 Pese a que las tierras de uso comunal no suelen ser ámbito exclusivo de las mujeres, sí suelen ser el lugar del cual las mujeres extraen su subsistencia y productos comerciales. En ciertas etapas de intensificación del uso de la tierra y de manejo del paisaje, las tierras de uso comunal pueden convertirse en la fuente principal de sustento de las mujeres o de sus contribuciones a su hogar y a la comunidad (Roy 1980, Dahlberg 1981). Donde hay abundantes tierras -como las utilizadas por algunos habitantes del bosque, los agricultores y los pastores nómadas-, el bosque o las tierras de pastoreo son compartidos por hombres y mujeres, y su división se hace, probablemente, basándose en el trabajo, conocimientos prácticos y seguridad. En general, las mujeres están encargadas de recolectar alimentos y leña, fibra, algunas plantas medicinales y, además, otros productos forestales y de forraje “menores”. A veces, también se ocupan de los animales de pastoreo o ramoneo, pero tienen mayor responsibilidad por los demás productos y actividades mencionados. 
 Aunque los hombres pueden sustituir sus actividades forrajeras recurriendo al trabajo asalariado o a la producción agrícola y pecuaria intensificada, el grupo podría seguir dependiendo muchísimo de los productos forestales y forrajeros recolectados por las mujeres. Al precautelar los derechos de propiedad y usufructo de las mujeres sobre los bosques y pastizales circundantes, se podría contribuir a impedir el deterioro del medio ambiente y a conservar importantes fuentes de alimentos y otros productos. También se defendería la condición de la mujer y sus derechos consuetudinarios a utilizar y proteger las tierras forestales y de pastoreo, en extensión y calidad suficientes. 
 A medida que avanzan los ciclos de expansión de las aldeas y de conversión e intensificación del uso de la tierra, las áreas de uso común podría ser un ámbito residual que les queda a las mujeres, a falta de otros. En el proceso de intensificación del uso de la tierra, que va desde el barbecho en maleza hasta los cultivos múltiples (Raintree 1987), podría cambiar notablemente el acceso de las mujeres a las áreas de recolección y su dependencia de esas áreas, y los terrenos de uso común podrían pasar de un nicho espacial a otro en el transcurso del tiempo. Esta transición también está marcada por permanentes adaptaciones entre el uso de áreas comunales y el uso de los nichos intersticiales en la unidad agrícola o finca. 
 En los sistemas de barbecho en maleza, las mujeres hacen su recolección de productos en los bosques ubicados en la periferia de la aldea, generalmente combinándola con el trabajo en los campos agrícolas más distantes del linaje o del hogar (Ruthenberg 1976). Muchos de los mismos productos, o productos equivalentes, se recolectan de los barbechos dispersos que se encuentran en diversas etapas de explotación. A medida que se va acortando el tiempo de barbecho en respuesta a la falta de tierras/presión demográfica (Boserup 1970, Lagemann 1977), la diversidad, calidad y cantidad de los productos puede disminuir. Entonces, las mujeres pueden verse obligadas a intensificar sus actividades de recolección en el bosque periférico o en tierras de cultivo y barbechos cortos, según la distancia al bosque, el tipo de productos procurados y las condiciones de acceso al bosque y a las tierras agrícolas. 
 Es posible que, eventualmente, las mujeres encuentren acceso a los terrenos en barbecho de la familia o del linaje ya tomado por cultivos permanentes; incluso su acceso a los barbechos estacionales puede verse limitado por cultivos múltiples y regadío. La variación de los cultivos y la reducción de la diversidad de cultivos y malezas pueden eliminar las posibilidades de productos secundarios del sistema de cultivo … A menos que la recolección siga siendo una actividad de los mismos propietarios, es muy posible que esos productos sean relegados a la condición de subproductos sin nicho alguno, si las plantas o el nicho no se redefinen como la propiedad de quien hace la recolección. Quizás, esto explica la integración de la forma y función del bosque en sistemas tradicionales agroforestales de varios pisos, en zonas donde la recolección era realizada por hombres y mujeres y el proceso de intensificación estaba orientado por los valores tradicionales de ambos. 
 Las tecnologías agroforestales pueden empeorar o mejorar esta situación problemática (Hoskins 1983). Por ejemplo, un nuevo sistema de cultivo en franjas podría desplazar los arbustos o malezas que son verduras comestibles (Fortmann, este volumen). Además, la plantación de enriquecimiento y un manejo más intensivo de especies leñosas escogidas (exóticas o autóctonas) en las tierras de cultivo y de pastoreo, podrían permitir que las mujeres cuenten con productos forestales o de forraje dentro de un sistema que sea compatible con los cultivos o pastizales de los hombres. Para ello sería necesario conocer, con toda claridad, cuáles son los derechos de propiedad o de usufructo de las mujeres sobre los árboles. 
 Por cuanto las tierras de cultivo tienden a utilizarse cada vez más para los monocultivos o para una agricultura más uniforme e intensiva, las mujeres tendrían que recurrir al bosque más distante o al monte de matorral para recolectar productos. También podrían decidir contentarse con los productos de primera necesidad (leña y forraje) que puedan rescatar de un área de uso común deteriorada y sobrepastoreada, sacrificando así la calidad, cantidad y diversidad de productos por la proximidad. Algunas mujeres modifican sus horarios para que concuerden con la distribución espacial de los recursos. Visitan frecuentemente los terrenos de uso común, y ocasionalmente los bosques más distantes para obtener productos especiales o primarios que son estacionalmente escasos en la finca y el terreno de uso común (el forraje proveniente de los arboles, por ejemplo). 
 Los terrenos de uso común también comprenden los nichos intersticiales sin dueño conocido, como los lados de las carreteras, hondonadas y linderos. En lugares donde no hay tales terrenos comunes propiamente dichos, las mujeres suelen recurrir a “tomar en préstamo” leña menuda, privilegios de pastoreo y otros bienes y servicios primarios de las tierras boscosas pertenecientes a algún vecino, familiar o patrón. Esta práctica se ha generalizado en Kenia entre los vecinos o miembros del mismo clan. En América Latina la relación de clientelismo entre el patrón y el agricultor, que predomina en las zonas rurales, muchas veces incluye esta modalidad. 
 Resumen de las ventajas de la plantación en areas de uso común para las mujeres
  • acceso a la tierra para la producción
  • acceso a tierras de mejor calidad que aquellas a las cuales tendrían acceso normalmente
  • la conveniencia (eficiencia) del acceso local a las plantaciones concentradas de recursos que normalmente están dispersos -como en “un supermercado”.
  • reducción del tiempo y mejor coordinación del trabajo; p. ej., mediante arreglos laborales rotativos de la fuerza laboral con un grupo que maneja la propiedad común
  • economías de escala obtenidas facilitando el cercado, cuidado, protección y comercialización de productos provenientes de plantaciones concentradas en bloques.
  • acceso concentrado a la capacitación y asistencia
  • beneficios de la “curva de aprendizaje grupal”
  • acceso al crédito
 
 Adaptado de Rocheleau 1987. "Women, trees and tenure: implications for agroforestry research and development. En: J.B. Raintree (ed). Land, trees and tenure, ICRAF y el Centro de Tenencia de la Tierra, Nairobi y Madison, WI. U.S.A. 

Decisiones sobre la ubicación de los árboles: la respuesta dada a la cuestión de saber dónde plantar los árboles puede tener una repercusión trascendental en el éxito de las labores de plantación forestal. Hay otra decisión que es igualmente importante, pero a la cual no se le suele prestar la debida consideración: cuándo no deben plantarse árboles. El ejemplo en el recuadro siguiente, ilustra la misma problemática suscitada en la India respecto de la plantación de monocultivos de eucalipto en los terrenos de uso común y baldíos de las aldeas. Independientemente de cómo se distribuyen los beneficios, la sustitución de la vegetación orginal por plantaciones exóticas puede resultar, en ocasiones, en una reducción neta de los beneficios para los usuarios tradicionales de las tierras. Es un problema de ubicación, por cuanto todo depende de dónde se plantarán los árboles y de cuál es la vegetación que ya está ahí.

 Plantación de árboles en “matorrales inservibles” en Burkina Fasso 
 Los funcionarios locales del gobierno y los consultores forestales escogieron una extensión de tierra descrita como “matorral inservible”. Diseñaron un plan para desbrozar el matorral, la vegetación arbustiva y los árboles torcidos y para plantar hileras rectas y poco espaciadas de especies exóticas para leña. Pero, ni quienes diseñaron el proyecto ni los forestales se habían dado cuenta de que este barbecho de maleza, aparentemente inservible, formaba parte de un sistema agroforestal autóctono que guardaba un delicado equilibro. 
 Las mujeres del lugar ayudaban a sus maridos a labrar los campos de cereales y cultivaban sus huertos. Pero, además de estas actividades tan visibles, recolectaban nueces shea (Butyrospermum paradoxum) de las cuales elaboraban aceite de cocina, recogían hojas y semillas indispensables para las nutritivas salsas para los cereales feculentos que consumían, buscaban gramíneas y cortezas para elaborar y teñir cestos y esteras, preparaban remedios caseros de las hojas, vainas y raíces, y dejaban que sus cabras ramonearan en los matorrales y arbustos de esta zona que parecía no usada. Las mujeres también transportaban, encima de sus cabezas, ramas muertas y leña menuda para combustible de cocina. Sus hijos consumían el tradicional fruto del baobab (Adansonia digitata) o cazaban animales pequeños en el sotobosque. Sus maridos cortaban palillos para masticar (el sustituto local de la limpieza de los dientes) y hacían tiras de la corteza y las doblaban para formar sogas. Toda la familia recogía y comía “pasas del desierto” (frutas Cissus) y otras frutas y nueces, y varios miembros de la familia ganaban pequeñas sumas de dinero vendiendo leña y otros elementos excedentes encontrados en el matorral. 
 Esa tierra no era, como había parecido, inservible. Su uso era esencial para satisfacer las necesidades de subsistencia de las poblaciones locales. Al implantarse el proyecto, se desbrozó la tierra para quitar la vegetación natural y, en lo que fue la tierra de todos, se plantaron árboles para leña que se venderían en el mercado urbano, vedando así su uso para los lugareños. La plantación de este proyecto se quemó, y los habitantes pensaron que el fuego se prendió porque los derechos tradicionales al uso de la tierra habían sido vulnerados por los dirigentes y los administradores del proyecto. Los habitantes habían perdido el acceso a los productos forestales, que eran esenciales en su sistema agroforestal propio. 
 Extracto tomado de: M.W. Hoskins, 1982. “Observations on indigenous and modern agroforestry activities in West Africa”. United Nations University Workship on Problems in Agro-Forestry, Junio. Universidad de Friburgo. 

A veces, la opción cero es la mejor. Sin embargo, la mayoría de veces, las opciones no se limitan a una elección entre a) la sustitución total de la vegetación existente, o b) el no hacer nada. Hay una serie de opciones intermedias, desde el manejo mejorado de la vegetación existente hasta el desbroce selectivo y promoción de las especies útiles, para enriquecer las plantaciones con especies económicas seleccionadas (sean plantas autóctonas o exóticas no agresivas). Todo ello puede emplearse para lograr una vegetación semi-domesticada mixta más rica, trabajando con y no contra la diversidad natural de las formas vegetativas existentes. El manejo de los terrenos boscosos naturales es un tema que va cobrando importancia para la investigación en apoyo del desarrollo forestal comunitario (Carlson y Shea 1986, Heermans 1987, Shepherd 1987).

B.5 Disposición de las plantaciones en el terreno

Las decisiones respecto del lugar en el paisaje donde se realizará la plantación de los árboles son muy diferentes de aquellas sobre la disposición espacial de los árboles que se plantarán (geometría, espaciamiento, arquitectura vertical), sin importar que sean monocultivos o árboles cultivados en combinación con otros, o qué cuidados culturales sean necesarios para mantener la disposición espacial deseada, o cuál sea la dimensión temporal adoptada, etc.

En las plantaciones forestales, el interés en la disposición espacial se ha reducido, en general, a cuestiones del espaciamiento de los árboles en plantaciones en bloque o del espaciamiento lineal de plantaciones en los bordes de las carreteras. En la agroforestería, los árboles tienen un área de distribución que ofrece mayores posibilidades de configuración geométrica. El Cuadro 18 presenta lo que se propone ser un resumen práctico de las posibilidades más relevantes.

Cuadro 18. Posible disposición de los árboles en el espacio y el tiempo, incluso de los plantados como monocultivos o en asociación con otros componentes de los sistemas agroforestales.

En el espacio
Disposición zonal
 Plantación en bloques
  Plantaciones forestales
  Bosquetes
  Huertos
  Bancos de forraje
 Plantaciones lineales
  Plantaciones en linderos
  Cercos vivos
  Franjas en curvas de nivel
  Cultivos intercalados con hileras de setos vivos
Disposiciones mixtas
 Poco densas: Arboles dispersos en tierras de cultivo o pastoreo
 Densas: Huertos arbolados de pisos múltiples (p. ej., los huertos caseros de Java y los bosques de la localidad)
En el tiempo
Sistemas sucesorios
 Sucesiones locales manejadas
 Taungya
 Sucesiones experimentales (p. ej., barbecho plantado-->rotacional HI-->permanente HI>--pisos múltiples HI>
Sistemas rotacionales
 Barbechos locales manejados
 Barbechos enriquecidos
  Barbechos económicamente enriquecidos
  Barbechos biológicamente enriquecidos
 Cultivos intercalados con hileras de setos vivos rotacionales
Sucesiones rotacionales
 Sistemas locales complejos (p. ej., corta y quema de los Bora, bosquetes de los Ifugao)
 Diseños experimentales complejos

Bajo el rubro de disposiciones espaciales, la división básica entre las disposiciones zonales y mixta es una función del grado de interacción entre los árboles y otros componentes del sistema de cultivo dentro de los sistemas agroforestales. Se prefieren las disposiciones zonales, cuando la intención es minimizar la interacción entre los árboles y otros cultivos. El ejemplo extremo es un bosquete de una sola especie en una plantación forestal. Los árboles clásicos utilizados en forestería, como Pinus, Cupressus y Eucalyptus, se desarrollan bien en esos sistemas y constituyen ejemplos del ideotipo de “producción”; es decir, árboles que crecen bien en plantaciones en bloque, densas y de una sola especie.

Cuando el objetivo es maximizar el contacto y promover una asociación más estrecha entre los árboles y demás cultivos, se seleccionan las disposiciones mixtas. Para que los componentes arbóreos prosperen en estas combinaciones, los posibles ideotipos serían, más bien, los dos siguientes: 1) un ideotipo “asociativo” con una capacidad excepcional para compartir recursos en combinaciones con especies múltiples, y/o 2) un árbol que se amolde al ideotipo elevado de “aislamiento”, con un dosel ligero o estacional o, quizás, un dosel que arroje una sombra más densa pero que crezca solamente en combinación con especies de sotobosque relativamente tolerantes de sombra (Huxley y Raintree 1983).

La clasificación según la combinación y disposición de los componentes es una de las maneras más comunes y útiles de clasificar los sistemas agroforestales:

Cuadro 19. Las prácticas agroforestales clasificadas por la combinación de componentes y la disposición (Fuente: Young 1989)

PRINCIPALMENTE AGROFORESTAL (árboles con cultivos)
Rotacional
 1.Barbecho plantado con árboles
 2.Taungya
Espacialmente mixtas
 3.Arboles en tierras de cultivo
 4.Combinaciones de plantaciones con cultivos
  -con árboles de piso superior
  -con cultivos arbóreos/arbustivos de pisos inferiores
  -con cultivos herbáceos
  -huertos con árboles en pisos múltiples
 5.Huertos con árboles
  -huertos caseros
Espacialmente zonificados
 6.Cultivos en franjas
 7.Plantaciones en linderos
 8.Arboles para conservación de los suelos
  -barreras de setos
  -fajas de barrera en pastos
  -en terraplenes, etc.
  -en terrazas
 9.Rompevientos y fajas protectoras
 10.Transferencia de biomasa
 
PRINCIPALMENTE O PARCIALMENTE SILVOPASTORILES (árboles con pasturas y ganado)
Espacialmente mixtos
 11.Arboles en tierras de pastoreo o pastizales
 12.Cultivos de plantación con pastizales
Espacialmente zonificados
 13.Setos vivos principalmente como barreras
 14.Bancos de forraje de uso múltiple
 
COMPONENTE ARBOREO PREDOMINANTE
 15.Bosquetes con manejo para usos múltiples
 16.Rehabilitación forestal dirigida a la producción:
  -en tierras erosionadas
  -en tierras salinizadas
  -en arenas movedizas
 17.Taungya (véase 2 más arriba)
 
OTRAS PRACTICAS Y ASPECTOS ESPECIALES
 18.Apicultura con forestería
 19.Desarrollo forestal acuícola (árboles con actividades pesqueras)
 20.Arboles en el manejo de aguas
 21.Agroforestería con riego

B. 6 Opciones de manejo

Los aspectos del manejo referentes a la disposición espacial de los árboles y otros cultivos se han tratado bajo el rubro de “disposición” en el algoritmo del diseño. En esta sección, el tema central es el manejo de la biomasa de árboles individuales. Muchos árboles y arbustos exhiben una enorme flexibilidad de forma y productividad en respuesta a la manera en que son tratados para modificar su forma natural de desarrollo.

En los siguientes recuadros se resumen los principios y prácticas más importantes de la manipulación de la masa forestal mediante la poda.

 Principios de la poda de árboles 
 La poda puede modificar la forma de un árbol, la producción total de materia seca por árbol y la distribución de la materia seca dentro del árbol. 
 Principios del control de la forma
Muchos árboles perennes leñosos pueden ser formados y podados para que adopten una variedad de configuraciones y tamaños muy distintos de los que les son naturales. Los siguientes principios se aplican a muchos árboles: (a) la poda estimula el brote de las yemas durmientes, (b) las yemas distales, cerca de los extremos cortados, están estimuladas para crecer más que las yemas basales, (c) la poda cerca del nivel del suelo produce vástagos más largos que si se podara más arriba, (d) en cierto sentido, la poda invierte el proceso de envejecimiento del árbol: los nuevos vástagos son ‘vigorosos’, menos periódicos en su crecimiento, tienen menos brotes cortos y una mayor dominancia apical, (e) en muchas especies hay una tendencia a producir nuevos vástagos, que salen de las yemas en reposo para crecer verticalmente, (f) los vástagos ascendentes más altos llegan a ser dominantes, especialmente cuando hay deficiencia de nutrientes; y si no se los toca, estos vástagos reconstituirán al árbol en su forma juvenil (reiteración), (g) la poda de extensión horizontal de los vástagos (beinding) detiene su alargamiento y se estimula el crecimiento de yemas en su superficie superior, especialmente de las yemas que están en el punto más alto de los vástagos arqueados y más cercanos al sistema radicular.
 
 Principios relativos a la producción de materia seca
La poda generalmente disminuye la producción total de materia seca por árbol porque se eliminan las hojas, y la poda de las raíces tiene igual efecto porque detiene el crecimiento de nuevo follaje. Sin embargo, la disminución de la productividad puede ser menor que la esperada porque la fotosíntesis neta podría incrementarse con las hojas que quedan. Si se poda únicamente el follaje viejo y sombreado, es posible que no disminuya la producción de materia seca. Siempre que se vaya a eliminar el follaje viejo de los árboles para forraje o abono vegetal, es más conveniente eliminar solamente los vástagos viejos, especialmente en los rodales cerrados.
 
 Principios relativos a la distribución de la materia seca
Hay tres principios básicos que deben observarse al manipular la distribución de materia seca en los árboles. Primero, la proporción de materia seca dedicada a la madera del fuste en relación con la de los vástagos foliados, depende del tamaño de la zona cambial del fuste en relación con otras zonas generatrices. Si se mantiene el tamaño pequeño de los árboles y se fomenta la ramificación, una proporción relativamente reducida del incremento de la materia seca total se utilizará para producir madera de fuste, mientras que si se deja que los árboles crezcan mucho en longitud y no se fomenta la ramificación (mediante la poda), una proporción mayor del incremento de materia seca total se utilizará para producir madera de fuste. Por tanto, manipulando la altura y cantidad de ramas de un árbol, se puede modificar la proporción de materia seca dedicada a los vástagos foliados, en relación con la leña o madera de gran diámetro.
 
 En segundo lugar, debe comprenderse que las tasas de crecimiento relativo de los troncos de los árboles son proporcionales con las tasas de crecimiento relativo de las raíces y de las copas; es decir, que hay firmes relaciones alométricas tronco-hoja y tronco-raíz, tal como hay firmes relaciones alométricas vástago-raíz. Esto significa que: (a) no es posible modificar permanentemente la tasa de crecimiento de una parte de la estructura vegetativa sin modificar, simultáneamente, las tasas de crecimiento de todas las demás partes vegetativas; y (b) el incremento del diámetro y la conicidad de los troncos dependerán del tamaño y disposición de las copas. 
 En tercer lugar, ni la poda del vástago ni de la raíz puede modificar, permanentemente, las relaciones alométricas vástago-cambium-raíz. La poda de los vástagos detiene el crecimiento de la raíz, temporalmente, y la poda de la raíz detiene, temporalmente, el crecimiento de los vástagos. En ambos, lo hace en proporción con la cantidad de vástago o raíz que ha sido eliminada y durante el tiempo que demore en restablecerse la alometría original vástago-raíz. La poda de la raíz jamás desvía los elementos asimilados hacia los vástagos, sino hacia las raíces. El desrame pronunciado incrementa la proporción de materia seca tomada por los nuevos brotes foliados, pero no modifica las relaciones alométricas entre las raíces, el cambium y las hojas. 
 Adaptado de M.G.R. Cannell, 1983. “Plant management in agroforestry: manipulation of trees, population densities and mixtures of trees and herbaceous crops”. En: P.A. Huxley. Plant Research and Agroforestry, ICRAF, Nairobi, Kenia. 

 Prácticas básicas de poda de árboles 
 Para simplificar el tema, las prácticas de poda pueden dividirse en cuatro tipos básicos: (a) operaciones para que las ramas se expandan lateralmente, es decir, la poda de extensión horizontal de la rama y la poda para el rebrote de cepa, (b) operaciones que desraman el fuste principal y fomentan la ramificación (reposición de ramas), (c) operaciones que limitan la ramificación pero dejan intacto el fuste principal, y (d) poda de las raíces. A continuación se presentan ejemplos de las primeras tres operaciones: 
  
 Poda de extensión horizontalPoda para rebrote de cepa o desmoche 
 Tanto la poda para la extensión horizontal como para el rebrote de cepa aumentan la cubierta sobre el suelo por cada árbol, de modo que necesitan plantarse menos árboles. Los rebrotes verticales pueden cortarse repetidamente, y son sustituidos rápidamente por nuevos brotes; requiere menos deshierbe que para volver a plantar y ofrece todas las demás ventajas del brote de retoño. El desmoche periódico también volverá accesibles los rebrotes foliados para la cosecha o el ramoneo y, al restringir el desarrollo de los fustes y estructuras leñosas, esta poda incrementará la proporción de materia seca que pasa a los nuevos brotes foliados. El nuevo crecimiento puede depender considerablemente de las reservas radiculares y resulta solamente cuando los tocones y sistemas radiculares individuales son grandes, lo cual significa un mínimo tamaño del árbol y un mínimo espaciamiento, combinados con un desmoche oportuno y un ciclo de poda mínimo. Las necesidades de los árboles son muy variadas, y debe ensayarse con cada nueva especie para determinar el régimen de poda óptimo. 
  
 TrasmocheDesrame arbustivo 
 El trasmoche y el desrame arbustivo son dos operaciones básicas de desrame. El trasmoche no es más que un desrame alto para rebrote: el trasmoche alto producirá árboles con un mayor potencial maderero y el desarrollo de grandes sistemas radiculares individuales, mientras que el trasmoche y el desrame bajo producirán crecimientos arbustivos horizontales con un mayor potencial de producción forrajera. El rebrote de nuevos vástagos será menos vigoroso cuando su distancia de las raíces es mayor. Como sucede con el corte para el rebrote de cepa, la frecuencia de corte óptima para asegurar la supervivencia y rápida recuperación, dependerá de las especies, el entorno y la cantidad de follaje que quede. Teniendo presente que los árboles trasmochados tienen una mayor capacidad de reserva, después del corte, que los cortados para el rebrote de cepa, los árboles que no se recuperan bien luego del corte para rebrote de cepa pueden hacerlo después del trasmoche. Este puede ser preferible; por ejemplo, para mantener el nuevo follaje lejos de los animales y para permitir la producción de madera y leña gruesa. 
  
 Poda basal de ramasPoda selectiva de ramas 
 La poda basal de ramas puede consistir únicamente en la eliminación de las ramas inferiores, como se hace en la silvicultura intensiva, disminuyendo así la conicidad del tronco y reduciendo el número de nudos en la madera del fuste, sin que se reduzca considerablemente el incremento del volumen del fuste. Esta operación es conveniente en los bosques cultivados para tener madera de gran valor, y también alguna leña de pequeño diámetro. También, la poda de ramas puede ser sumamente selectiva -como lo es en la arboricultura frutícola- limitando el crecimiento vertical, fomentando el desarrollo horizontal de un dosel superior no denso y bien iluminado, con lo cual se activa la producción de yemas frutales y se permite que algo de luz llegue a los cultivos herbáceos que están debajo. En general, los árboles perennes leñosos que producen frutas o semillas requieren cuidados culturales mucho más complicados que los cultivados para algún producto vegetativo. Aquellos árboles que se cultivan específicamente para frutas o nueces, generalmente se beneficiarán con los cuidados intensivos. 
 La poda de raíces, aunque detiene el desarrollo de vástagos en proporción directa con la cantidad de raíz eliminada, puede tener dos efectos positivos: (a) estimula la producción de yemas de flor, y (b) el rebrote de un sistema radicular más fibroso, con un mayor acceso a los nutrientes inmóviles del suelo; y, ocasionalmente, en suelos fósforo deficientes puede mejorar temporalmente el crecimiento del árbol. En el caso de las plántulas, el sistema radicular más fibroso, producido mediante la incisión de corta o el picado, les ayuda a sobrevivir después del trasplante. 
 Adaptado de M.G.R. Cannell 1983. "Plant management in groforestry: manipulation of trees, population densities and mixtures of trees and herbaceous crops. En: P.A. Huxley (ed) Plant Research and Agroforestry, ICRAF, Nairobi, Kenia. 

Cuando los árboles se han cultivado en íntima asociación con cultivos extensivos, la poda de raíces también podría ser conveniente para limitar la competencia de los árboles con los cultivos, según ha comenzado a indicar la investigación sobre la plantación de eucalipto en linderos y el cultivo en franjas de leucaena (Drake Hocking, comunicación personal; Jonsson et al. 1988; Szott 1989).

La cuestión de la competencia de las raíces y su tratamiento en los sistemas de cultivos agroforestales intercalados es sumamente compleja y escasamente comprendida por el momento. Por ejemplo, al contrario de lo que establece el conocimiento convencional respecto de la conveniencia de reducir la penetración de las raíces de los árboles en la zona radicular de los cultivos asociados, los últimos trabajos sobre los cultivos intercalados con árboles ha planteado que las altas densidades radiculares de árboles fijadores de nitrógeno podrían mejorar el crecimiento de los cultivos asociados, creando condiciones favorables para la captación de fósforo soluble y de otros minerales por las especies no fijadoras de nitrógeno (Gillespie 1989). Evidentemente, habría que realizar más investigaciones antes de formular recomendaciones serias para muchos sistemas agroforestales prometedores pero no muy bien comprendidos y que podrían servir para los servicios de extensión.

B. 7 El repertorio tecnológico

El siguiente cuadro presenta una lista estructurada de palabras claves, sinónimos y términos conexos empleados en el campo de los “potenciales agroforestales” de la base de datos D y D del ICRAF. La lista presenta los resultados de los estudios de diagnóstico y planificación llevados a cabo en una muestra de los 40 sistemas de uso de la tierra que han ingresado en la base de datos, hasta la fecha. Como un resumen empírico de lo investigado por los grupos de trabajo móvil en la etapa de planificación de actividades para proyectos de investigación agroforestal, esta lista ilustra el alcance de las consideraciones de planificación agroforestal extraídas de los formularios preparados para el diagnóstico rápido en los procedimientos de detección D y D. Este listado tiene un carácter indicativo, únicamente, y no debe considerarse como una lista definitiva de las consideraciones de diseño agroforestal. Sin embargo, en combinación con otros materiales de consulta que se encuentran en los apéndices, podría servir como una indicación preliminar del repertorio tecnológico que está a disposición del nuevo forestal.

Cuadro 20. Vocabulario básico de quienes diseñan actividades agroforestales orientadas al diagnóstico. Fuente: base de datos D y D del ICRAF (los primeros 40 sistemas registrados del uso de la tierra)

APORTES DE LOS ARBOLES
materiales de construcción
 postes
 madera aserrada
 madera utilizable
 madera de obra
 material de techumbre
subproductos (varios)
dinero
 árboles como cultivos comerciales
 árboles para reducir los costos de insumos (fertilizante, árboles repelentes de insectos)
plantaciones de árboles domésticos
barbechos
 biológicamente acelerados
 biológicamente enriquecidos
 económicamente enriquecidos
 económicamente productivos
 barbechos enriquecidos
 bosquetes en barbecho
 barbechos mejorados
 bosquetes rotacionales (=bosquetes en barbecho)
fertilidad (véase manejo del suelo)
forraje
 plantas para apicultura
 árboles de forraje dispersos (silvopastoril)
 bancos de forraje
 bancos de forraje (de cortar y llevar)
 bancos de forraje (pastoreo)
 árboles forrajeros
 microcuencas de captación y orientación del crecimiento de la vegetación
 áreas de pastoreo de pisos múltiples con cercos vivos
 huertos con árboles productores de vainas
 prados temporales (leguminosas arbustivas/gramíneas en rotación con cultivos)
 pastizales mejorados (leguminosas arbustivas/gramíneas permanentes)
 árboles para alimento de peces
fruta
 huertos frutales/pastizales
 producción y elaboración de frutas
leña
 cercos de leña menuda
 otros usos
cultivos forestales industriales (para elaboración local)
prados temporales (mezcla de pastos/leguminosas arbustivas en rotación con cultivos)
estaquillado vivo
cercos vivos
 cercos densos espinosos
 postes vivos de cerco
 cercas de leña menuda
árboles biocidas
postes
protección
 protección del granizo para los cultivos de té
 árboles de sombra
 fajas protectoras
 rompevientos
manejo del suelo
 erosión
 acrecentamiento o conservación de la fertilidad (ciclaje de nutrientes, fijación de nitrógeno, mayor OM y CEC)
 cultivos intercalados con cercos vivos en hileras
 cultivos intercalados mixtos
 conservación de la humedad (escorrentía reducida, mayor infiltración, capacidad de retención de agua, protección contravientos)
madera
 materiales de contrucción (véase más arriba)
 combustible de leña (leña combustible, leña termoenergética, carbón de leña)
 
DISPOSICION DE LOS ARBOLES
plantación en linderos
cercados
 cercados con árboles de piso superior
cercos vivos en hileras
 cercos vivos en curvas de nivel
 cercos vivos intercalados
 cercos vivos permanentes con cultivos intercalados
 cercos vivos rotacionales con cultivos intercalados
plantaciones intersticiales
cultivos intercalados mixtos
 enriquecimiento de las plantaciones de cultivos arbóreos y bosques (otros árboles y cultivos alimentarios de subpiso)
 cubierta vegetal en plantaciones forestales
 árboles de usos múltiples con cultivos en tierras labrantías
pisos múltiples
 pastaderos de múltiples pisos
 huertos caseros de múltiples pisos
huertos
 huertos frutales
 huertos para producción de árboles (forraje)
rotacionales
 cercos vivos en hileras con cultivos intercalados
 manejo del pastoreo
 bosquetes (en barbecho)
franjas
 franjas alternadas de árboles madereros y pastizales
 franjas de pastos/árboles en curvas de nivel
 franjas de árboles madereros
 árboles en franjas de pastos (protección de márgenes de ríos)
árboles en…
 terrenos de cultivo
 fajas de gramíneas
 pastizales
 terrazas de secano
 terraplenes en arrozales
 elevadores de terrazas
 orillas de ríos
 costados de hondonadas
árboles de piso superior
cultivos zonales intercalados
rompevientos y barreras protectoras (véase protección más arriba)
bosquetes
 bosquetes de alta densidad
 bosquetes en barbecho
 bosquetes rotacionales (bosquetes en barbecho)
 fajas de bosquetes
 
INTERVENCIONES CONEXAS
domesticación de plantas recolectadas en huertos caseros
conservación del entorno
 preservación de terrenos boscosos autóctonos
 desbroce selectivo de terrenos boscosos
 árboles en franjas de gramíneas
 proteción de márgenes de ríos
 protección de hondonadas
rehabilitación ambiental
 restauración de cárcavas
 rehabilitación de árboles útiles en microcaptaciones en tierras de pastoreo y capacitación.
integración de otros componentes agroforestales en los bosques
 cultivos herbáceos
 forraje herbáceo
 cubierta vegetal
 ganado
 agricultores
elaboración de productos forestales (alimentos, fibra, extractos industriales, etc.) para generar valor agregado en la industria local.

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